La devastación del INTA empuja al país al subdesarrollo

Bases Federadas manifiesta su más enérgico rechazo al desmantelamiento del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria. Por estas horas, el gobierno nacional ejecuta un plan de reducción de personal, a la vez que revisa la venta de inmuebles del INTA, tanto sean edificios como campos para la investigación y la extensión, recursos estratégicos del instituto y sin los cuales su trabajo no puede realizarse. Este gobierno avanza sobre la soberanía científica y tecnológica, desprotege los territorios extensos del país y deja sin una cobertura esencial a los pequeños productores y a los agricultores familiares. En el mismo sentido, se reducen drásticamente en el presupuesto 2024 los fondos para todo el sistema de ciencia y tecnología, como el de INTA, el INTI, el CONICET, el SENASA, las Universidades Públicas y todos los organismos que hacen que la Argentina pueda tener desarrollo rural, producción, arraigo, gestión del territorio y alimentos. Sin estos organismos activos y fortalecidos, el camino hacia el subdesarrollo y la dependencia tecnológica externa de la argentina se presenta como una realidad. Al igual que en la década de los 90, este gobierno pretende dejar de tener soberanía en sus investigaciones y en su extensión, anulando el organismo que es referente nacional e internacional en desarrollo agronómico. Instamos a todas las entidades del sector agropecuario, integrantes del Consejo Directivo del INTA, a no avalar ninguna decisión que afecte el instituto, ni desde los recursos humanos, ni desde sus presupuestos, ni de los bienes necesarios para su normal desenvolvimiento. Rechazamos enérgicamente este proceso, tal como lo hiciera hace décadas nuestro gran líder agrario, Humberto Volando, y decimos que la argentina se recuperará con el INTA, nunca sin el INTA y menos aún contra el INTA. BASES FEDERADAS

La fractura del “campo”

Bases Federadas, una nueva entidad agraria en contra del modelo reprimarizante Un documento de la entidad Bases Federadas, que representa a pequeños y medianos productores, señala como “elocuente el sesgo reprimarizante, extractivista, concentrador y extranjerizante”, de las políticas implementadas por el gobierno nacional. “Las cartas están sobre la mesa, se han caído todas las caretas. Del gobierno y de algunos del sector”, advierten en el escrito a 70 días de ejecución de políticas asfixiantes para el sector, por parte de la pareja de hermanos gobernantes. “Bases Federadas nace de un grupo de dirigentes que estamos en disidencia con la actual conducción de Federación Agraria. Cansados de manifestar nuestra posición, la de trabajar en la agenda propia e histórica, por fuera de la Mesa de Enlace”, expresa en diálogo con El Cohete a la Luna el secretario de la nueva entidad, Sebastián Campo. “La discusión la dimos internamente en los congresos y siguiendo todos los caminos institucionales y, sin embargo, la conducción de (Carlos) Achetoni pretende seguir formando parte de la Mesa de Enlace”, critica el pequeño productor arrendatario y ex presidente de la Federación Agraria de Pergamino. Desde Bases Federadas consideran que no tiene sentido seguir formando parte de la Mesa de Enlace. “Habrá servido en la coyuntura de 2008, que ya cumplió su ciclo. Las agendas de trabajo (de las entidades que componen la mesa) son totalmente distintas, porque la historia así lo manda. Entonces, al ver que por las vías internas de Federación Agraria no podíamos conseguir que la entidad retome sus reclamos históricos, decidimos armar una nueva entidad”, explica Campo.  La conforman dirigentes que tienen muchísimos años en la militancia de Federación Agraria y que están construyendo un camino nuevo. “Intentamos representar al pequeño y mediano productor que —desde nuestro punto de vista— no tiene hoy representación gremial”, dice Campo. Bases Federadas tiene como presidente a Omar Príncipe y como vice a Carlos Baravalle. Vienen trabajando juntos desde 2018, pero la entidad se constituyó formalmente el 9 de marzo de 2023. En el escrito, plantean ocho puntos, haciendo referencia a cómo impactan sobre los pequeños y medianos productores las políticas implementadas por el nuevo gobierno. Aumento de combustibles; aumento de retenciones; extranjerización de la tierra; ley de semillas; devaluación; súper-poderes; política exterior y pesada herencia (una crítica a la inacción del anterior gobierno). El aumento de combustibles, liberado por la gestión de Milei, “alcanza en solo 60 días un aumento acumulado de 86%”. Desde Bases Federadas expresan que esto constituye “un golpe al bolsillo del productor, por tratarse de un insumo básico en el funcionamiento de cualquier chacra”. Y no mirándose su propio ombligo —como hacen productores autoconvocados por su angurria—, señalan que “esto no es lo peor, ya que el incremento es directamente trasladado a fletes, con el consiguiente aumento en los alimentos de todos los argentinos”. En el documento, recuerdan la promesa de campaña incumplida por Milei de “retenciones cero para todas las producciones”, y señalan que “el actual Presidente y su equipo proponen y defienden la suba del 12% al 15% para trigo y maíz, del 9% al 15% para carne vacuna, del 31% al 33% para harina y aceite de soja, y sumando el 15% a todas las economías regionales”. Y que Milei “ha mentido para conseguir los votos del sector”. Califican de entreguista la extranjerización de la tierra que propone el gobierno. “La libre venta de tierras a extranjeros constituye el mayor gesto de entrega colonial de nuestro tan preciado territorio nacional”. Por eso, manifiestan su repudio “a tan cipaya decisión” y recuerdan la lucha de aquellos  próceres que “entregaron su vida heroicamente por la libertad de este glorioso país”. Sobre la ley de semillas, Bases Federadas refiere a la decisión del gobierno de adherir al UPOV 91 (normativa establecida en 1991 para regular la protección de derechos de propiedad intelectual que rige sobre las variedades de vegetales y uso de semillas), indicando que “pretende avasallar derechos adquiridos”. Y sostienen: “Perder el uso propio, para un chacarero, es entregar una bandera histórica de lucha a las empresas más concentradas del mundo”. Dejan en claro que siempre estarán a favor del “desarrollo de nuevas tecnologías”, pero aseguran que “los Estados deben ejercer un control para evitar el avance de las grandes multinacionales” por sobre los productores locales. En ese sentido es que advierten la profundidad que tiene “esta problemática”, a la que consideran “más crucial en los sectores hortícolas, donde la semilla es un insumo determinante. Quien controla las semillas, controla la cadena agroalimentaria, y, por lo tanto, la disponibilidad, la calidad y el precio de los alimentos de todos los argentinos”. Rompen con el molde utilizado en 2008 con el único fin del poder económico concentrado dueño del monopolio mediático de lograr sintetizar con la palabra campo un imaginario colectivo y homogéneo que no es tal, pero que establecieron como único, para enfrentar al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. Así, al advertir, en el documento de Bases Federadas, sobre el impacto que tuvo para los productores la devaluación que realizó Milei, explican que “la denominación ‘campo’ no describe a un sector poblado de heterogeneidades y, por lo tanto, estas medidas afectan de manera distinta a cada uno de los actores”. Demuelen lo que llaman “el imaginario popular”, que cree que “toda devaluación impacta positivamente” en el sector y sostienen “que la devaluación generada por el ministro Caputo, que llevó el valor del dólar oficial de 366 a 800 pesos, es decir un 119%, toma al productor en una situación crítica, producto de los efectos de la brutal sequía que golpeó la campaña 22/23”. De esta forma, debido a la devaluación, “un alto porcentaje de pequeños productores se encuentra en situación de morosidad en dólares con su cooperativa o acopio de confianza. Ya no tiene granos para comercializar y, además, debe parte del arrendamiento de la tierra”. Subrayan que “esa deuda contraída por el productor de manera obligada se duplicó de un día para otro, generando una nueva aceleración en el proceso de desaparición de productores”,

Ajuste en el Inta. La entidad Bases Federadas reclama al Gobierno no achicar el organimo

Ante la decisión del Gobierno nacional de reducir la planta de personal del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) a través de un plan de retiro voluntario y de sacar a la venta inmuebles del organismo, la entidad Bases Federadas salió a criticar la postura oficial. “Este Gobierno avanza sobre la soberanía científica y tecnológica. desprotege los territorios extensos del país y deja sin una cobertura esencial a los pequeños productores y a los agricultores familiares”, asegura la entidad nacional, creada en 2023, e integrada por exdirigentes de Federación Agraria Argentina, cuyo objetivo principal –según sus integrantes– es la generación de políticas públicas diferenciadas para los pequeños y medianos productores. La entidad criticó la decisión oficial de haber reducido drásticamente en el presupuesto 2024 los fondos para todo el sistema de ciencia y tecnología, como el de Inta, el Inti, el Conicet, el Senasa, las universidades y todos los organismos que “hacen que la argentina pueda tener desarrollo rural, produccion, arraigo, gestión del territorio y alimentos” Sus dirigentes sostienen que sin estos organismos activos y fortalecidos, el camino hacia el subdesarrollo y la dependencia tecnológica externa de la argentina se presenta como una realidad. Ante esta situación de ajuste que atraviesa el Inta, la entidad gremial solicita a todas las entidades del sector agropecuario, integrantes del consejo directivo del organismo técnico, a no avalar ninguna decisión que afecte el instituto, ni desde los recursos humanos, ni desde sus presupuestos, ni de los bienes necesarios para su normal desenvolvimiento. Críticas y pedido de renuncia a la conducción del Inta Carlos Baravalle, vicepresidente de Bases Federadas, criticó a la actual conducción del Inta, conformada por Nicolás Bronzovich y Beatriz “Pili” Giraudo, vinculados con la Asociación Argentina de de Productores de Siembra Directa (Aapresid). Para el dirigente cordobés, la entidad a la que pertenecen ambos funcionarios“mostró sus dientes”, al afirmar que “detrás de todos sus bellos títulos que emiten se esconde su verdadera génesis, su espíritu preventista, que por estos día no le alcanza con ensanchar sus campos; ahora quieren eliminar todo el soporte tecnológico para productores de menor escala”. “Como vicepresidente del Bases Federadas acompaño al reclamo del personal de Inta en defensa de sus puestos de trabajos y promuevo la renuncia de los miembros de Aapresid en el Inta, por nombramiento del presidente de la Nación Javier Milei, que dejaron visible tener conflicto de intereses”, finalizó Baravalle.

La devastación del INTA empuja al país al subdesarrollo

Con el desmantelamiento del INTA producto de la política impuesta por el presidente Javier Milei, el país viene siendo empujado hacia el subdesarrollo. Por eso, desde Bases Federadas rechazamos en forma enérgica la devastación del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria”, dijo Omar Farana, referente zonal de la entidad agraria representativa de pequeños y medianos productores del sector agrícola. Así, Farana denunció que el gobierno nacional lleva adelante “un claro plan”, cuyo objetivo es “eliminar al INTA toda vez reduce al personal; la mayoría técnicos altamente capacitados y al mismo tiempo induce a la venta de inmuebles de dicho organismo, ya sean edificios o campos destinados a la investigación, a ensayos y a la experimentación”. Con énfasis expresó: “Todo ataque, como este, a la soberanía científica y tecnológico desprotege a la excelencia productiva, por lo tanto es un retroceso, un abandono estatal que su‑ merge al subdesarrollo”. “ATACA A LA CIENCIA Y A LA TECNOLOGÍA” De la misma forma, Fara‑ na advirtió que con “tamaña disparada de buscar la ful‑ minación del INTA”, el go‑ bierno nacional deja sin una cobertura técnica esencial a los pequeños productores. En otro orden de cosas, el referente de Bases Federadas en la zona de General San Martín dijo: “Cómo no afirmar que estamos retrocediendo hacia el subdesarrollo si el gobierno de Milei reduce drásticamente los presupuestos para el sistema de ciencia y tecnología representada por el INTA, el INTI, el Conicet, el Senasa y de las universidades”. Al insistir en su apreciación, Omar Farana fue claro en afirmar que sin los citados organismos activos y fortalecidos “será imparable transitar hacia el subdesarrollo y hacia la dependencia tecnológica externa”. Al respecto manifestó: “Bases Federadas viene advirtiendo que este gobierno nacional pretende dejar sin soberanía científica, por lo que es indispensable no avalar ninguna decisión que afecte al INTA y demás organismos científicos y tecnológicos”. “LA IMPROVISACIÓN TAMBIÉN ES ATRASO Y POBREZA” “En consonancia con el gobierno nacional, con improvisación el actual gobierno del Chaco también empuja a la producción primaria al atraso y a la pobreza, en menos de un año cambió su ministro de producción y a 15 de finalizar la fecha de siembra se acordó de ayudar al productor algodonero después de mirar para otro lado cuando se dejó caer la ley del Fondo Compensador Algodonero”, fue otra frase de Farana. Afirmó que estas son las mayores evidencias de que en el Chaco hay una política sectorial: “Se estableció una ley de emergencia, pero ningún productor recibió un solo peso, eso es atraso, pobreza y avanzar hacia el subdesarrollo”, enfatizó. Finalmente dijo que “todo habla a las claras de que es un gobierno chaqueño para pocos”. “La situación general se agrava por estar arro‑ dillado al gobierno nacional y porque en un alto nivel de improvisación e incapacidad de gestión no se llega al campo con ayuda en tiempo y forma, tampoco se escucha una sola voz en defensa del INTA”, concluyó.

Ajuste en el Inta. La entidad Bases Federadas reclama al Gobierno no achicar el organimo

Ante la decisión del Gobierno nacional de reducir la planta de personal del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) a través de un plan de retiro voluntario y de sacar a la venta inmuebles del organismo, la entidad Bases Federadas salió a criticar la postura oficial. “Este Gobierno avanza sobre la soberanía científica y tecnológica. desprotege los territorios extensos del país y deja sin una cobertura esencial a los pequeños productores y a los agricultores familiares”, asegura la entidad nacional, creada en 2023, e integrada por exdirigentes de Federación Agraria Argentina, cuyo objetivo principal –según sus integrantes– es la generación de políticas públicas diferenciadas para los pequeños y medianos productores. La entidad criticó la decisión oficial de haber reducido drásticamente en el presupuesto 2024 los fondos para todo el sistema de ciencia y tecnología, como el de Inta, el Inti, el Conicet, el Senasa, las universidades y todos los organismos que “hacen que la argentina pueda tener desarrollo rural, produccion, arraigo, gestión del territorio y alimentos” Sus dirigentes sostienen que sin estos organismos activos y fortalecidos, el camino hacia el subdesarrollo y la dependencia tecnológica externa de la argentina se presenta como una realidad. Ante esta situación de ajuste que atraviesa el Inta, la entidad gremial solicita a todas las entidades del sector agropecuario, integrantes del consejo directivo del organismo técnico, a no avalar ninguna decisión que afecte el instituto, ni desde los recursos humanos, ni desde sus presupuestos, ni de los bienes necesarios para su normal desenvolvimiento. Críticas y pedido de renuncia a la conducción del Inta Carlos Baravalle, vicepresidente de Bases Federadas, criticó a la actual conducción del Inta, conformada por Nicolás Bronzovich y Beatriz “Pili” Giraudo, vinculados con la Asociación Argentina de de Productores de Siembra Directa (Aapresid). Para el dirigente cordobés, la entidad a la que pertenecen ambos funcionarios“mostró sus dientes”, al afirmar que “detrás de todos sus bellos títulos que emiten se esconde su verdadera génesis, su espíritu preventista, que por estos día no le alcanza con ensanchar sus campos; ahora quieren eliminar todo el soporte tecnológico para productores de menor escala”. “Como vicepresidente del Bases Federadas acompaño al reclamo del personal de Inta en defensa de sus puestos de trabajos y promuevo la renuncia de los miembros de Aapresid en el Inta, por nombramiento del presidente de la Nación Javier Milei, que dejaron visible tener conflicto de intereses”, finalizó Baravalle.

El meticuloso productor que hizo números y descubrió que el poder de compra de sus terneros retrocedió casi 40% desde que empezó el gobierno de Milei

Carlos Baravalle, un productor mediano de la zona de Carrilobo, en Córdoba, ya ha sido noticia en Bichos de Campo porque él mismo creó un tablero de control (que después se convirtió en una aplicación) para ordenar el trabajo de los ganaderos de cría y poder elevar los índices de destete, en su caso hasta un récord de 95%. Pero ese no es el tema que nos convoca hoy para hablar de este chacarero tan meticuloso.

Bases Federadas, una nueva entidad agraria en contra del modelo reprimarizante

Un documento de la entidad Bases Federadas, que representa a pequeños y medianos productores, señala como “elocuente el sesgo reprimarizante, extractivista, concentrador y extranjerizante”, de las políticas implementadas por el gobierno nacional. “Las cartas están sobre la mesa, se han caído todas las caretas. Del gobierno y de algunos del sector”, advierten en el escrito a 70 días de ejecución de políticas asfixiantes para el sector, por parte de la pareja de hermanos gobernantes. “Bases Federadas nace de un grupo de dirigentes que estamos en disidencia con la actual conducción de Federación Agraria. Cansados de manifestar nuestra posición, la de trabajar en la agenda propia e histórica, por fuera de la Mesa de Enlace”, expresa en diálogo con El Cohete a la Luna el secretario de la nueva entidad, Sebastián Campo. “La discusión la dimos internamente en los congresos y siguiendo todos los caminos institucionales y, sin embargo, la conducción de (Carlos) Achetoni pretende seguir formando parte de la Mesa de Enlace”, critica el pequeño productor arrendatario y ex presidente de la Federación Agraria de Pergamino. Desde Bases Federadas consideran que no tiene sentido seguir formando parte de la Mesa de Enlace. “Habrá servido en la coyuntura de 2008, que ya cumplió su ciclo. Las agendas de trabajo (de las entidades que componen la mesa) son totalmente distintas, porque la historia así lo manda. Entonces, al ver que por las vías internas de Federación Agraria no podíamos conseguir que la entidad retome sus reclamos históricos, decidimos armar una nueva entidad”, explica Campo.  La conforman dirigentes que tienen muchísimos años en la militancia de Federación Agraria y que están construyendo un camino nuevo. “Intentamos representar al pequeño y mediano productor que —desde nuestro punto de vista— no tiene hoy representación gremial”, dice Campo. Bases Federadas tiene como presidente a Omar Príncipe y como vice a Carlos Baravalle. Vienen trabajando juntos desde 2018, pero la entidad se constituyó formalmente el 9 de marzo de 2023. En el escrito, plantean ocho puntos, haciendo referencia a cómo impactan sobre los pequeños y medianos productores las políticas implementadas por el nuevo gobierno. Aumento de combustibles; aumento de retenciones; extranjerización de la tierra; ley de semillas; devaluación; súper-poderes; política exterior y pesada herencia (una crítica a la inacción del anterior gobierno). El aumento de combustibles, liberado por la gestión de Milei, “alcanza en solo 60 días un aumento acumulado de 86%”. Desde Bases Federadas expresan que esto constituye “un golpe al bolsillo del productor, por tratarse de un insumo básico en el funcionamiento de cualquier chacra”. Y no mirándose su propio ombligo —como hacen productores autoconvocados por su angurria—, señalan que “esto no es lo peor, ya que el incremento es directamente trasladado a fletes, con el consiguiente aumento en los alimentos de todos los argentinos”. En el documento, recuerdan la promesa de campaña incumplida por Milei de “retenciones cero para todas las producciones”, y señalan que “el actual Presidente y su equipo proponen y defienden la suba del 12% al 15% para trigo y maíz, del 9% al 15% para carne vacuna, del 31% al 33% para harina y aceite de soja, y sumando el 15% a todas las economías regionales”. Y que Milei “ha mentido para conseguir los votos del sector”. Califican de entreguista la extranjerización de la tierra que propone el gobierno. “La libre venta de tierras a extranjeros constituye el mayor gesto de entrega colonial de nuestro tan preciado territorio nacional”. Por eso, manifiestan su repudio “a tan cipaya decisión” y recuerdan la lucha de aquellos  próceres que “entregaron su vida heroicamente por la libertad de este glorioso país”. Sobre la ley de semillas, Bases Federadas refiere a la decisión del gobierno de adherir al UPOV 91 (normativa establecida en 1991 para regular la protección de derechos de propiedad intelectual que rige sobre las variedades de vegetales y uso de semillas), indicando que “pretende avasallar derechos adquiridos”. Y sostienen: “Perder el uso propio, para un chacarero, es entregar una bandera histórica de lucha a las empresas más concentradas del mundo”. Dejan en claro que siempre estarán a favor del “desarrollo de nuevas tecnologías”, pero aseguran que “los Estados deben ejercer un control para evitar el avance de las grandes multinacionales” por sobre los productores locales. En ese sentido es que advierten la profundidad que tiene “esta problemática”, a la que consideran “más crucial en los sectores hortícolas, donde la semilla es un insumo determinante. Quien controla las semillas, controla la cadena agroalimentaria, y, por lo tanto, la disponibilidad, la calidad y el precio de los alimentos de todos los argentinos”. Rompen con el molde utilizado en 2008 con el único fin del poder económico concentrado dueño del monopolio mediático de lograr sintetizar con la palabra campo un imaginario colectivo y homogéneo que no es tal, pero que establecieron como único, para enfrentar al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. Así, al advertir, en el documento de Bases Federadas, sobre el impacto que tuvo para los productores la devaluación que realizó Milei, explican que “la denominación ‘campo’ no describe a un sector poblado de heterogeneidades y, por lo tanto, estas medidas afectan de manera distinta a cada uno de los actores”. Demuelen lo que llaman “el imaginario popular”, que cree que “toda devaluación impacta positivamente” en el sector y sostienen “que la devaluación generada por el ministro Caputo, que llevó el valor del dólar oficial de 366 a 800 pesos, es decir un 119%, toma al productor en una situación crítica, producto de los efectos de la brutal sequía que golpeó la campaña 22/23”. De esta forma, debido a la devaluación, “un alto porcentaje de pequeños productores se encuentra en situación de morosidad en dólares con su cooperativa o acopio de confianza. Ya no tiene granos para comercializar y, además, debe parte del arrendamiento de la tierra”. Subrayan que “esa deuda contraída por el productor de manera obligada se duplicó de un día para otro, generando una nueva aceleración en el proceso de desaparición de productores”, que se da en paralelo “con una frenética concentración del uso